jueves, 17 de marzo de 2016

Cuando Estados Unidos incendió Tokio, matando a 100.000 personas, un 10 de marzo de 1945.


El bombardeo Operación Meetinghouse en Tokyo provocó alrededor de 100.000 muertos en unas pocas horas (9-10 de marzo de 1945). De esta carnicería apenas se nos habla nunca. De hecho, el lanzamiento de las bombas atómicas sobre Hiroshima y Nagasaki logra, ante todo el mundo, que no se recuerde que los gobernantes norteamericanos practicaron un genocidio sobre la población japonesa de la época más allá del horror nuclear. El lanzamiento de las bombas atómicas solamente fue un acto más de ese plan genocida. Estos hechos aún no han sido juzgados por tribunales penales internacionales y, sin duda, no habrá paz en el mundo mientras aquellos crímenes no sean juzgados.

Pero hoy ha sido Estados Unidos quien ha declarado a Daesh como organización perpetradora de genocidio... Y este pasado febrero fue la UE, la misma que firma un tratado con Turquía que dista MUCHO de la defensa de los derechos humanos y dos de cuyos miembros poseen armas de destrucción masiva, quien también declaró a Daesh como autora de crímenes de lesa humanidad, crímenes de guerra y genocidio.

Qué rápido ven los poderosos de Occidente la viga (ciertamente la sangrienta viga en el caso de Daesh) en el ojo ajeno y qué lentos en ver los peores de los crímenes que puedan concebirse en el suyo propio; qué rápidos en intentar camuflar su terrorismo de siempre con los también crímenes -sin duda inhumanos y execrables- de los radicales que venden petróleo y compran las armas precisamente a quienes ahora, con golpes de pecho, les condenan... y qué lentos en reconocer sus horribles y numerosos crímenes de guerra.


(vídeo oficial U.S.)

             enlaces sobre el bombardeo de Tokyo: