Es asombroso que en el s. XXI la iglesia esté metida, como fruto de la herencia viva del franquismo, en TODAS las instituciones hasta la médula. En el caso del ejército es un escándalo institucional, político y moral de grandes dimensiones que atenta a bocajarro contra la Constitución.
Las noticias al respecto son no ya numerosas, sino absolutamente diarias: https://www.lamarea.com/2021/08/12/defensa-amplia-el-gasto-en-sacerdotes-43-millones-de-euros-en-2020/.
Por ejemplo: el Jefe de las Fuerzas Armadas, perteneciente a una "Casa Real" que está acusada públicamente de beneficiarse a gran escala del bien público, trata de protegerse con las bendiciones de la iglesia católica: