A Manuel de Cosa mucha gente en Jerez lo ha conocido por formar parte del bar y proyecto cultural “Tragaluz”, en calle Almenillas. Este centro cultural de los años 80 y 90 era en Jerez un lugar de encuentro y una oxigenante ventana abierta a nuevas corrientes musicales, pictóricas, literarias… Manuel Benicio, Maite Ortiz, Manuel de Cosa y otros lo dinamizaron con acierto hasta consolidarlo como un referente de calidad, al margen de los caminos trillados de la aburrida cultura oficialista.
Manuel fue un trabajador honesto afiliado a CCOO, una persona muy de izquierdas y absolutamente sensible y comprometido con los ideales de libertad, defensa de los DDHH, antifascismo, república, pasión por la música y la cultura alternativas, etc.
Quizás su mayor valor (visto desde la perspectiva de los amigos) ha sido regalarnos un estilo sincero, directo, sencillo, muy cariñoso con sus amigos. Una manera de ser alegre, con desparpajo, sin doblez alguno, siempre animoso, dispuesto a reir y a disfrutar de la vida. Ese talante, el de amar los pequeños momentos gratos de cada día, el de pasarlo bien con sus amigos, era su sencilla -y sabia- forma de estar. Quitarle hierro a los asuntos más graves y echarse palante con una sonrisa, una fórmula que poca gente sabe aplicar (porque esa difícil ecuación requiere un corazón noble, el que Manuel tenía).
Sabemos de otras cosas de Manuel -como su amor a la familia-, pero lo dicho ya es más que suficiente para entender que esta vida que se ha ido deja una huella humana llena de significación en cuantos le han conocido. Nuestras condolencias más sentidas a su familia por el fallecimiento de Manuel.