viernes, 1 de mayo de 2015

En vez de trabajo y dignidad para Andalucía, llegan a Rota y Morón barcos y marines para más guerras.


La locura bélica de la OTAN que las cúpulas de la mayoría nuestros partidos políticos comparten sin miramientos no deja de asombrarme y de estremecerme profundamente. El territorio del estado español -más el conjunto de sus relaciones internacionales y diplomáticas- está siendo radicalmente militarizado como efecto, entre otras cosas, del quijotesco puesto que ahora 'disfrutamos' en el Consejo de Seguridad de la ONU. Pura marca España.

A la gran "vuelta de tuerca" que el capitalismo está implementado en Europa se une, cómo no, un correlato militarista que tiene puesto su punto de mira en, básicamente, el Golfo Pérsico y la frontera este de Europa.

La situación estratégica global, donde las armas de destrucción masiva siguen jugando un papel central, es más que alarmante. Las potencias continúan moviendo sus envenenadas fichas en un tablero de escasez de recursos energéticos, aumentos de las poblaciones, crisis económica, crisis medioambiental, etc.

El contexto no puede ser más peligroso y adverso para los intereses de vida, de dignidad, de solidaridad internacional, etc., de los pueblos. Este mapa (en: "Le Monde diplomatique en español", nº 235, mayo de 2015, pág. 4) refleja claramente la clase de avispero en carne viva que es el Golfo Pérsico, así como la sofocante presencia norteamericana en el mismo (una presencia norteamericana en el Golfo Pérsico directamente proporcional al aumento de tropas estadounidenses en Rota y Morón):



En Europa observamos peligrosos movimientos de tropa:
En Morón y Rota los marines se multiplican a un ritmo vertiginoso:
A Rota llega el tercer destructor de guerra que forma parte del "escudo antimisiles":
Para noviembre la OTAN prepara unas gigantescas maniobras militares en España:

Un panorama de rearme, militarización y estallido de conflictos bélicos que debe reactivar nuestras conciencias y nuestro compromiso por la Paz.

Respecto al silencio que los grandes partidos políticos andaluces, exceptuando a Izquierda Unida, Equo, Podemos,  etc., guardan en lo que se refiere a las bases de Rota, Morón y Gibraltar, no se me ocurre otra palabra para describirlo que la de indignidad. Porque siempre la esencia de la Cultura de Andalucía consistió en la solidaridad, no en la guerra. Y estas bases militares atentan contra la vida, contra la dignidad de los pueblos y contra la esencia de nuestra cultura.