sábado, 7 de septiembre de 2024

"Ciudades en guerra" (Angelina Gatell, 1926-2017)

Sobre Angelina Gatell véase p.e.:

https://ctxt.es/es/20170301/Culturas/11307/Homenaje-Angelina-Gatell-Ortega-Lucas-poesía-poeta.htm

https://addi.ehu.es/bitstream/10810/50408/1/TESIS_ALAVA_CARRASCAL_MARIA%20EUGENIA.pdf

https://www.eldiario.es/andalucia/angelina-gatell-ultimos-testigos-podemos_1_4794170.html




CIUDADES EN GUERRA


He visto las ciudades, Señor,

allí donde la guerra

suena como un rumor muy hondo

como de agua encerrada entre las rocas.


He visto las ciudades, su destierro

de árboles y lirios...

los bloques de cemento que levantan

su triunfo tristísimo, tan árido,

tan lejos de tu mano y del instinto

elemental del hombre...


He visto las ciudades, sus calles y sus plazas

donde la tierra amordazada sueña

arrancarse del peso que la oprime

y abrirse para el grano y para el fruto.


He visto allí, la guerra agazapada

por todos los rincones. Vi los pechos

frustrados de las madres que cambiaron

labios pequeños por pájaros oscuros

que picotean dento

abriendo sombras, sombras y más sombras.


Vi los rostros cansados, un cansancio racial subiendo siempre

por venas y pupilas...


Un ruido incesante de hierros y mordazas,

un rechinar eterno...

y por todo la guerra como un eco;

la guerra como un pálido fantasma

recorriendo las calles, entrtando en los portales,

abriendo portezuelas de los coches,

parada en los escaparates.


Y en los niños, Señor, como una rosa

inaccesible y bella, entresoñada

por sus mínimos sueños;

como un himno, Señor;

como una arcada nimbando sus cabezas;

como un canto prensil que los empuja

sin apenas saber;

como una meta;

como un triunfo del hombre;

como un rito.

Y así, Señor, pulsos y labios,

brazos y dientes;

así, Señor, mandíbulas y sexos

creciendo en puro espanto,

en puro odio;

latir, besar, morder, amar,

todo en el odio;

y concebir sin tregua para el odio...


Vi la guerra en las ciudades,

cabalgando en los lomos de los perros,

de los perros, Señor, también en odio...

La guerra en las ciudades como un río

dolorosamente subterráneo,

agua por todas partes rezumando...


Así la guerra, el manotazo

de los hombres soberbios,

de tantos hombres-larvas, hombres-perros,

hombres en puro odio, en pura guerra...