No me sorprende ver cómo el estado
y su aparato judicial y policial, los grandes partidos, muchos medios de
comunicación y una parte de la opinión pública –aunque no mayoritaria– arremete tan vehementemente contra los
jornaleros andaluces y andaluzas del SAT que han protagonizado un acto simbólico
al llevarse (aunque no para ellos) unos carritos con alimentos básicos de un
supermercado, el cicatero Mercadona.
El caso es ya bien conocido por todos y no
voy a extenderme en la descripción de los hechos. Sólo quiero expresar aquí,
muy brevemente, tres cosas:
1ª.- A mí la acción del SAT me ha parecido
impecablemente pacífica, exceptuando un leve y desafortunado gesto de un
participante que le da con la palma de la mano en el hombro a una empleada del
establecimiento, según se ve en este vídeo: http://www.youtube.com/watch?v=SJtICzQlj7s&feature=player_embedded.
Pero ésta del SAT ha sido una acción de manual de Noviolencia, lo mismo que
cuando sus militantes han ocupado la finca militar “Las Turquillas” en
Écija-Osuna -semiabandonada por el Ejército- y ha venido la Guardia Civil y los
ha desalojado sin que haya habido ni un incidente.
2ª.- Felicito al SAT por esta línea de acción
pacífica, valiente y tan cargada de simbolismo. El indiscutible éxito de esta
línea de trabajo político demuestra claramente la fuerza inmensa de la
Noviolencia practicada desde Andalucía. El gobierno, nervioso, sorprendido y
éticamente en entredicho, que haga ahora lo que -con toda la prensa
internacional mirándole con lupa- considere mejor… ¿quizás nada para no
soliviantar una respuesta aún mayor y más generalizada?, ¿quizás algo, un poco de cara a la galería, para no
defraudar los ánimos inquisitoriales -y los votos- de algunos sectores
extraordinariamente conservadores?.
3ª. Creo que el SAT, a pesar de ser un
sindicato que suscribe las tesis pacifistas del desarme, la cooperación internacional
y la paz, y haber dado sobradas muestras de su oposición a la militarización de
Andalucía, no es una organización que suscriba los principios de la
Noviolencia. Alguna vez he oído a algunos de sus militantes, en las Marchas a
Rota y Morón, corear lemas que no comparto en absoluto y de los que me siento
totalmente alejado. Además, no comparto tampoco el hecho de que algunos de sus
líderes lleven ocupando tantísimo tiempo cargos políticos en los que deberían -en
mi opinión- haber sido sustituidos hace mucho por otros de sus compañeros o
compañeras. Pero todo esto no quita que esta organización nos acaba de dar una rotunda
lección de la capacidad de lucha y de la
dignidad de los andaluces y andaluzas que no están dispuestos a dejarse someter
por un discurso político humillante que sólo predica la resignación, la
obediencia y la exclusión social pura y dura.
Entonces, voy a hablar más claro aún: no sólo
me alegro muy sinceramente de que este sindicato haya hecho lo que ha hecho, sino que estoy
seguro de que mientras ellos y ellas sigan luchando de este modo habrá una
esperanza para Andalucía. El gobierno y los grandes partidos saben que el SAT
acaba de tocar a fondo y hacer saltar el sentimiento primigenio, ancestral, de
Libertad y de Dignidad de Andalucía… y por eso van a desatar, quizás poco a
poco, la represión judicial y policial sobre ellos y ellas. Por el momento, y
en su desesperación ante el dinamismo de los jornaleros andaluces, al gobierno lo
único que le ha faltado por decir es que lo de los carritos de la compra es
comparable a un “atentado”… porque, concluyamos, lo que el gobierno trata de
dejar claro ante la ciudadanía es muy simple: todo acto de crítica, o de
resistencia activa o pasiva, o de oposición del tipo que sea a la política de destrucción de lo público y de recortes
sociales SERÁ CONSIDERADO UN DELITO Y SERÁ CASTIGADO, es decir: “sea demócrata y obedezca por su propio bien
o le haremos entrar en razón…”
Animándoles a que se mantengan en esta línea pacífica,
simbólica y de lucha activa, apoyemos al SAT abiertamente.
Cinco interesantes documentos, de solidaridad
con el SAT y frente a las directrices antisociales en la gestión de la “crisis”,
que han sido publicados recientemente:
1º.- Esther
Vivas: “Mercadona y
SAT: ¿Quiénes son los ladrones?”
2º.- Juan
Torres: “Los
jornaleros andaluces y la significativas diferencias de sensibilidad ante el
robo”:
3º.- Andaluces
de Alcalá: “Andaluces de
Alcalá expresa su solidaridad con el SAT”:
http://andalucesdealcala.blogspot.com.es/2012/08/andaluces-de-alcala-expresa-su.html
4º.- ATTAC-Andalucía:
“Solidaridad con el SAT y denuncia de la represión
social ante el incremento de la pobreza”:
5º.- R.A.N.A.: La Red Antimilitarista y
Noviolenta de Andalucía (R.A.N.A.) apoya la ocupación del
Sindicato Andaluz de Trabajadores/as de la Finca Militar “Las Turquillas” en
Écija y Osuna.