El ruido de sables que menciona este brillante diputado de Podemos me preocupa (aunque el PSOE quiera dar a entender que no es tal ruido y que solo ha sido producido por unos cuantos ancianos irrelevantes). La crisis absoluta de la Corona, de quien depende la función de Jefatura Suprema de las Fuerzas Armadas, me preocupa. Las actitudes autoritarias y de fomento del odio por parte de la derecha me preocupan. La retórica permanente de los bronquistas contra el gobierno "ilegítimo" (PSOE+Unidas Podemos) me alarma. El secuestro de la justicia por parte del PP me parece un torpedo de profundidad a la línea de flotación de la democracia.
Pero este brillante diputado de Podemos lo deja claro al final de su intervención: el gobierno está fuerte y hay que desarrollar el presupuesto general recién aprobado. La ciudadanía también sabe que es el grado absoluto de corrupción de la derecha lo que tiene tan tan nervioso al PP. Y ojalá el extremo derechismo de reducidos sectores de las FAS (en la reserva o no) sea debidamente depurado, conforme a la legislación vigente, para que no prospere.
Aunque en desacuerdo con algunas políticas concretas de Podemos (como no buscar con más determinación el recorte de los gastos militares), siento orgullo de que haya brillantes diputados como este hablando muy muy claro a la derecha más corrupta de Europa.
Seguimos.