El comunicado de ATTAC sobre los papeles de Panamá:
muestra cómo los estados permiten a algunos poderosos hacer sus negocios al margen de la legislación que nos afecta a todos los demás. Para la mayoría, entonces, palo y tentetieso, y carta blanca para la minoría que controla a los que gobiernan. Blanco y en botella.
Es obvio que los paraísos fiscales no son solamente una forma de hacer negocios fraudulentos evadiendo impuestos, son también, junto al gran poder las multinacionales, un gobierno mafioso paralelo (http://webs.ono.com/pag9/teodoro/otras.pdf) respecto a la regulación ejercida por los estados y las democracias. Son una organizadísima mafia consentida que, en buena medida, impone sus normas al resto del entramado económico. La parte no visible del iceberg de la corrupción de un sistema económico que genera masas empobrecidas al tiempo que enriquece a unos cuantos.
No olvidemos que las cifras que se mueven en estos paraísos con DESCOMUNALES:
(Fuente: "Tráfico de armas: el mercado negro mundial de armas ligeras", OXFAM Internacional)
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Véase:
-Las guerras de EE.UU. ya son un producto financiero: